Cada vez que accedes a una determinada página web queda registrada tu IP en los logs del servidor que aloja dicha página. Si quieres hacer tu verdadera IP invisible, utiliza Jap, una aplicación que te permite navegar tras un proxy y, por consiguiente, se oculta la dirección desde la que te conectas. El programa utiliza un sistema que impide conocer las IPs auténticas aun a los administradores del proxy que las oculta. Para ello, utiliza un método en el que no se efectúa una conexión directa al servidor web. Los usuarios son desviados de la ruta normal, empleando un sistema de intermediarios denominados Mixes.
Instalación, configuraciones y funcionamiento
Después de instalar Jap tendrás que llevar a cabo algunas configuraciones en tu navegador web para usar el servidor proxy local. (Dicha configuración es fácil de hacer siguiendo las instrucciones que acompañan al programa). Con la aplicación activada, la conexión de un usuario al sistema queda oculta, ya que se combina con la de los otros usuarios que están utilizando el servicio. Nadie podrá así determinar con que está conectando un determinado usuario, ni su propio proveedor del servicio de conexión a Internet.
A tener en cuenta…
Siempre que lo desees podrás activar o desactivar el anonimato. Podrás ver también, en cada momento, el nivel de seguridad. Por defecto Jap viene preconfigurado para utilizar varios servicios proxy gratuitos, aunque también es posible utilizar servidores de pago. En cualquier caso es posible que el servicio proporcionado esté caído, debido a procesos de mantenimiento. Se trata de un servicio que está en desarrollo constante, que se asienta sobre sofisticados métodos de investigación, y que, como producto de ello, persigue, sobre todo, la navegación segura.
Acceso
Es posible instalar esta aplicación en Windows, Mac y Linux, entre otros sistemas operativos. Para ello hay que acudir el menú Downloads, en el panel derecho, tras acceder a la web de soporte de Jap.
Aclaración final
NOTA: Aunque hay muchas personas que están en contra de estos métodos de navegación, por considerar que se encuentran en los límites de la ley, no podemos obviar su existencia. De ahí la razón de ser de este artículo, ya que consideramos que todos debemos tener conocimiento de lo que se cuece en la red de redes, en Internet. Los responsables de Jap indican, en el subtítulo de su web, que «el anonimato no es un crimen«. ¿Opinas los mismo?
