Sociedad

Sobre los Gestos Expresivos

Nos referimos a gestos biológicos que compartimos con otros animales, pero que tal como podemos leer a continuación muestran notables diferencias entre ellos y nosotros.

Sobre los Gestos Expresivos

Hay seis tipos de Gestos Primarios, de los cuales cinco son propiedad única del hombre, dependiendo de su complejo y desarrollado cerebro. La excepción es lo que se conocen como Gestos Expresivos, que todos los hombres comparten y que también son compartidos por otros animales. Entre ellos están los importantes mensajes de Expresión Facial, fundamentales en nuestra vida cotidiana de relación.

Todos los primates son altamente expresivos y, cuanto más se sube en la escala, más elaborados resultan los músculos faciales de que están dotados, permitiéndoles una amplia gama de señales faciales. En el hombre se llega casi a la perfección, hasta el punto de admitirse que la inmensa mayoría de mensajes no verbales son enviados a través de la cara.

Las manos humanas

Las manos humanas también se hicieron importantes, después de haberse liberado de la función de apoyo que cumplían en la locomoción del primate. Por medio de sus gesticulaciones, las manos humanas son capaces de transmitir cambios de humor complejos y sutiles en las conversaciones. Empleamos la voz gesticulación en forma distinta a gesto, éste es una acción manual hecha inconscientemente durante las relaciones sociales, mientras que el gesticulador enfatiza lo que está diciendo en un momento determinado.

Gestos naturales

Los gestos naturales casi siempre son espontáneos y los aceptamos sin precisarlos demasiado. Sí, decimos, puso una cara graciosa. Pero ¿cómo movió las cejas? No lo recordamos. Sí, decimos, movía los brazos al hablar, pero ¿cómo colocaba sus dedos? No lo sabemos, y sin embargo no estábamos distraídos. Vimos y oímos perfectamente. Lo que ocurre es que no necesitamos analizar estos actos, de la misma forma en que no necesitamos deletrear las palabras que oímos para ser capaces de comprenderlas. Son similares a los gestos incidentales antes vistos, porque aquí no se trata de una función mecánica: solo envían mensajes.

Es un mundo de sonrisas, encogimientos de hombros, asentimientos… Reír, entristecerse, mirar fijo o eludir la mirada, enrojecer o empalidecer… Son gestos que casi toda la humanidad hace en todas las partes del mundo. Pueden diferenciarse en intensidad u oportunidad, pero, básicamente, son actos que hacemos todos.

Las expresiones

Todos tenemos músculos faciales cuya única misión es mostrar expresiones. Todos nos mantenemos sobre dos pies en lugar de cuatro, liberando así nuestras manos para que bailen provocativamente en el aire mientras explicamos, discutimos y bromeamos en nuestros encuentros sociales. Es cierto que hemos perdido nuestra flexible cola y nuestro cruzado vello, pero lo hemos sustituido y mejorado con el movimiento de nuestros rostros, y con la danza incesante y evocadora de nuestras manos.

Gestos Expresivos

En sus orígenes, nuestros Gestos Expresivos están muy relacionados con nuestros Gestos Incidentales porque sus raíces también proceden de actos primitivamente no comunicativos. El puño cerrado de un gesticulador tiene su origen en el movimiento intencional de agredir a un oponente, igual que el fruncimiento de la cara de un hombre preocupado puede recordar el acto instintivo de protección de los ojos en el animal que espera un ataque. Pero la diferencia es que, en estos casos, el eslabón entre la acción física primaria y su descendiente (el Gesto Expresivo) ha sido roto: las sonrisas, muecas, mohines, mofas, son ahora prácticamente gestos puros, exclusivamente utilizados para comunicarse.

A pesar de su extensión mundial, los Gestos Expresivos están sujetos también a influencias culturales de tipo local. Aunque todos tengamos un mismo juego de tensores musculares para sonreír, no todos sonreímos exactamente igual o en las mismas ocasiones. Por ejemplo, todos los niños empiezan con idéntica facilidad a sonreír y a reír, pero quizás una tradición local insista en que al llegar a la madurez deben esconder sus reacciones, y por ello su risa adulta puede resultar apagada. Esas reglas locales pueden variar de sitio en sitio y dar la falsa impresión de que los Gestos Expresivos son inventos locales en vez de diversas formas de un sistema universal.

Fuente: El hombre al desnudo de Desmond Morris. Publicado, en el año 1977, por Muy Interesante, Biblioteca de Divulgación Científica

Fabriciano González

Amante de la informática y de Internet entre otras muchas pasiones. Leo, descifro, interpreto, combino y escribo. Lo hago para seguir viviendo y disfrutando. Trato de dominar el tiempo para que no me esclavice.

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