¿Puede el alcohol proteger al cerebro en un accidente?
Unos dicen que minimiza los daños tras una accidente y otros dicen que no. Son los resultados de diferentes estudios. ¿Con cuál nos quedamos? Lo que está claro es que nunca debemos conducir con un alto contenido de alcohol en la sangre.
Todos los días, fundamentalmente los fines de semana, leemos en los periódicos y medios en Internet, vemos en la televisión, la lista de accidentes mortales que salpican carreteras, autovías y autopistas de nuestra geografía nacional. Los que no mueren quedan, en muchas ocasiones, con daños físicos y psíquicos irreparables.
Muchos de los accidentados conducían bajo los efectos del alcohol. A pesar de ello, un estudio realizado en el año 2009 con 38.000 pacientes internados en hospitales de Estados Unidos, víctimas de una grave lesión cerebral traumática, producida como consecuencia de un accidente de tráfico, afirma que el 38 por ciento de los accidentados iban bebidos cuando se produjo el accidente y, al parecer, las posibilidades de morir eran menores en estos individuos.
¿Frena el alcohol los efectos de un accidente?
Uno de los responsables de la investigación, Ali Salim, MD, director del programa de la residencia de Cirugía General, Programa Educativo en el Cedars-Sinai Medical Center, en Los Angeles, había dicho: «Sabemos que está mal decir que el alcohol es bueno, especialmente porque es responsable de muchas de estas lesiones. Sin embargo, nuestro estudio sugiere que puede haber alguna ventaja en la supervivencia de las personas con elevado nivel de alcohol en sangre«.
¿Cómo actúa el alcohol?
Aunque no se sabe por qué el alcohol puede ser útil, se cree que puede amortiguar la acción de las catecolaminas, hormonas como la adrenalina y la dopamina, que son liberadas por el cuerpo después de una lesión traumática.
El alcohol también puede ayudar a disminuir la temperatura del cuerpo, según ha dicho David Hovda, Ph.D., profesor de neurocirugía en la Universidad de California, Los Ángeles, y director de la UCLA Brain Injury Research Center. Las temperaturas bajas contribuyen a la disminución de la muerte celular y a impedir la inflamación causada por lesiones cerebrales graves.
Otras opiniones
David Hovda, que no participó en el estudio, ha dicho que la acción del alcohol puede ser muy limitada. Los estudios realizados con animales han tenido resultados contradictorios. Se ha comprobado, en los animales, que los niveles bajos de alcohol protegen el cerebro, pero en el caso de que el nivel de alcohol sea alto el efecto no es beneficioso. Se ha observado también que en algunos casos el alcohol disminuye la supervivencia.
El alcohol en exceso no es bueno
Lo que está claro es que no es recomendable utilizar el alcohol como terapia después de un accidente. Y por lo que se ve, las opiniones de Hovda no están en consonancia con las de Ali Salim. Podemos afirmar por tanto que la bebida en exceso no es buena, aunque algunos crean que el alcohol minimiza los efectos dañinos en el cerebro tras un accidente. ¡Si bebes, no conduzcas!
Visto en CNN.com/health